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UITA
Unificando los trabajadores agroalimentarios y de hostelería en todo el mundo



Iraq y el Banco Mundial: Continúa el Saqueo

Incluido en el sitio web de la UITA el 27-Oct-2003

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Los rumores periódicos sobre cambios fundamentales en las políticas del Banco Mundial han demostrado nuevamente ser prematuros. Quienes buscan la evidencia de un Banco Mundial más benévolo, más suave deberían controlar la Evaluación Conjunta sobre las Necesidades de Iraq de Naciones Unidas / Banco Mundial recientemente publicada por el Banco y que se encuentra disponible en su sitio web (www.worldbank.org).

El estudio ha sido elaborado por la conferencia de donantes internacionales celebrada en Madrid los días 23 y 24 de octubre. Procura identificar las necesidades clave de la reconstrucción por sectores y fomentar las políticas macroeconómicas y de inversiones "apropiadas".

Aquéllos que están familiarizados con la historia y el enfoque global del Banco no tendrán ninguna sorpresa al respecto. La sección sobre la alimentación y la agricultura es un caso en cuestión. En un país asolado por la desnutrición y el desempleo, a la agricultura (que normalmente emplea más del 20 por ciento de la mano de obra) se le dedican unas escasas tres páginas (no hay ninguna página sobre el petróleo - ese expediente ya ha sido tratado). Se resumen a continuación las "Políticas y Temas Institucionales Clave" del Banco:

"Si se le presta un correcto apoyo y entorno de políticas, el sector agrícola de Iraq podría contribuir significativamente al crecimiento económico y la creación de puestos de trabajo. Es muy probable que la liberalización económica y la apertura de mercados a un buen ritmo contribuya de manera sustancial al ingreso, la seguridad alimentaria y la reducción de la pobreza en el país. El actual ministro ha adoptado los primeros pasos fijando el precio de los fertilizantes para los cultivos de invierno de trigo y cebada a precios más elevados que el año anterior, pero al mismo tiempo recomendó que los precios de las cosechas debían estar más cerca [es decir, más altos] que los precios en la frontera, señalando que el mercado, con el tiempo, será el principal propulsor de la agricultura. Él también estará entablando consultas de gran alcance sobre políticas para la reducción de los subsidios a los alimentos."

El estudio está plagado con referencias a las redes de seguridad social, pero los mecanismos nunca se puntualizan. Para evitar confusiones sobre los temas relativos a las políticas alimentarias clave, la sección sobre "Necesidades Inmediatas - 2004" demanda una labor "inmediata" sobre las "opciones de las reformas institucionales y de las políticas", incluyendo el "aumento del papel del sector privado, la producción competitiva, [y] la eliminación gradual de los subsidios". Pasando a las "Prioridades de Mediano Plazo" hasta el año 2007, la meta es un sector agrícola "caracterizado por operaciones predominantes del sector privado bajo condiciones de libre mercado".

En vano el sector buscará algún discernimiento respecto a las estructuras de propiedad, empleo, insumos o comercialización en la agricultura iraquí. Para los autores, es simplemente irrelevante quién posee la tierra o cómo se la trabaja, quiénes sufren hambre y quiénes no. En todo momento, en todo lugar, las prescripciones de las políticas son las mismas: se deben liberar los precios y se deben eliminar los subsidios a los alimentos. El Banco Mundial siempre ha negado tenazmente que procure un enfoque sobre la base de un molde de tamaño único con referencia a las políticas. No obstante, la sección agrícola del informe concluye que "Muchas de las prioridades para el sector de la agricultura son recogidas en las recomendaciones para otros sectores, incluyendo la administración de la tierra, la creación del empleo y el clima para las inversiones".

Si ello suena familiar, es debido a que todo esto lo hemos visto antes. Las fórmulas del Banco Central para la agricultura han fracasado espectacularmente en todos los lugares donde han sido aplicadas. El Banco solo no es exclusivamente responsable, pero en el mundo de hoy existe más inseguridad alimentaria, y no menos, tras décadas de panaceas de "libre mercado" en la agricultura. De ser aplicadas en Iraq, ocasionarán hambre y violencia, no democracia y desarrollo. La "sacudida y el temor reverente" prometidos por los militares estadounidenses están ahora siendo programados para el sector alimentario del país.

¿De quiénes son las necesidades que está abordando este manual de los inversores que pretende ser una "evaluación de necesidades?" Se suponía que las inversiones aportarían puestos de trabajo para los más de 7 millones de iraquíes desempleados. Pero las compañías de los EE.UU. están importando trabajadores/as migratorios para "reconstruir" Iraq. Kellogg Brown & Root, una subsidiaria de Halliburton, la ex compañía del Vicepresidente Cheney de los EE.UU., ha contratado el catering para los soldados norteamericanos a la Compañía Tamimi con sede en Arabia Saudita. Tamimi emplea 1.800 trabajadores/as del Sudeste Asiático para preparar y servir las comidas. Según el “Financial Times”, cuenta con unas "pocas docenas" de iraquíes como…personal de limpieza. Los/as trabajadores/as reciben una paga equivalente a 3 dólares por día y se les concede vacaciones una vez cada dos años. Según un gerente de Tamimi, la compañía no puede emplear iraquíes debido a que constituyen una "amenaza para la seguridad".

Iraq fue sistemáticamente saqueada durante décadas bajo la dictadura del partido de Baath. Actualmente se está preparando una nueva ronda de saqueo institucional sistemático. El Decreto 39 del jefe de la Autoridad Provisional de la Coalición, Paul Bremer, emitido en setiembre, concede a los inversores extranjeros el derecho irrestricto de repatriar las ganancias y otras formas de utilidades, inmediata e íntegramente, a la vez que anula todas las restricciones a la propiedad extranjera fuera del sector de la energía.

Un fondo de reconstrucción internacional ha sido establecido bajo la égida de la ONU y el Banco Mundial para fomentar las inversiones en Iraq por parte de los gobiernos que deseen ser considerados independientes de la política de los EE.UU. y el RU. Se supone que la supervisión internacional brindará mayor transparencia. La "Evaluación de las Necesidades" del Banco Mundial para Iraq inspira poca confianza de que aumentarán los beneficios para el pueblo iraquí. El congreso norteamericano ha comenzado investigaciones sobre informes acerca de licitaciones manipuladas de los contratos y estafas en las utilidades por parte de corporaciones compinches del Departamento de Defensa, que fueron las primeras en poner sus pies en la puerta. Es hora de situar las políticas del Banco Mundial para Iraq bajo la clara luz del día, si se ha de evitar una nueva ronda de saqueo.